Es una receta nacida en Egipto y adoptada en Oriente Medio. Hoy en día se consume en todo el mundo, pero es tradicional en Siria, Líbano, Palestina, Turquía, Israel, Armenia, Grecia y Chipre. Es óptima en picadas para untar el pan recién horneado -si es pan pita, mejor-. También se puede usar para untar zanahorias, apio, galletitas, nachos, papas fritas o batatas fritas, lo que prefieras.
INGREDIENTES
– 500 gr. Garbanzos
– 3 Dientes de ajo
– 3 Cucharadas de aceite de oliva o sésamo
– 3 Cucharadas de jugo exprimido de limón
– 1 Pizca de comino
– Pimentón a gusto
– Sal y pimienta a gusto
– 3 Cucharadas de salsa Tahine (si no tienes, no importa. Igual va a quedar perfecto)
PREPARACIÓN
– Lavar y remojar desde la noche anterior en agua los garbanzos (12 horas)
– Cocinar los garbanzos hasta que estén tiernos (como alternativa, se puede hacer la receta con los garbanzos cocidos de lata, pero siempre es mejor la versión natural)
– Procesar todos los ingredientes en una licuadora o utilizando una procesadora manual hasta lograr una pasta para untar (si requiere un poco más de líquido, se debe agregar agua)
– Se le pueden agregar nueces, piñones o almendras picadas arriba para decorar. Otra alternativa es espolvorear el hummus con aceite y especias como cilantro o perejil, a gusto.
– ¡Listo! ¡Disfruta tu hummus!
Para una versión más cremosa se le puede agregar yogur griego o crema. Los garbanzos son muy saludables y nutritivos, tienen proteínas, vitaminas B1, B2, B9, C, E, K y minerales como calcio, zinc, magnesio, hierro, potasio y fósforo.
