La sangría fue creada en España y es una de sus bebidas insignia más representativas. Es una excelente alternativa para tomar vino tinto en verano, porque es fresca, frutal, cítrica, perfecta para beber al borde de la pileta con unas buenas tapas. Te advertimos que te va a gustar mucho y vas a querer volver a hacerla. ¡Vamos por ella!
INGREDIENTES
– 1 Litro de vino tinto
– 2 Naranjas cortadas
– 2 Duraznos cortados
– 2 Bananas cortadas
– 1 Manzana cortada
– 1 Limón exprimido
– 1 naranja exprimida
– 1 Rama de canela
– 1 Granada (opcional)
– Almibar frío (1/4 taza de azúcar +1/4 taza de agua disueltos a fuego)
PROCEDIMIENTO
– Primero prepara el almibar con 1/4 taza de azúcar y 1/4 taza de agua a fuego hasta que el azúcar se disuelva. Colocalo en la heladera para que se enfríe.
– Mezcla en una jarra grande o ponchera el vino, las frutas cortadas, el jugo exprimido de la naranja, el jugo exprimido del limón, la rama de canela y el almíbar una vez frío.
– Deja macerar tu sangría de 1 a 2 horas antes de tomarla. ¡Agrégale unos hielos, y a disfrutarla!
Muchas veces en España rebajan la sangría con una gaseosa lima-limón, para hacerla más suave. Nosotros la preferimos pura, pero es cuestión de gustos. No tiene sentido usar un vino reserva para hacer una sangría, un buen vino joven será más que suficiente. Lo mejor es preparar tu sangría dos horas antes de su consumo así las frutas toman el sabor del vino y viceversa. Si se deja pasar más tiempo las frutas se van a oxidar y no es lo ideal.
